Articulo enviado a la redacción de la Comisión Mambi, Patria y Libertad por un Hermano Maestro Masón.
Comencemos despejando el concepto de Mambí que curiosamente se inserta en la esencia de este trabajo. Veamos lo que nos dice el gran etnólogo cubano Don Fernando Ortiz:
“Mambí” es un vocablo de formas substantivas y adjetivas aplicado al cubano separatista contra España, especialmente al que luchaba en armas por la cesación del coloniaje y el advenimiento de la independencia nacional. Mambí es una palabra africanoide, concretamente bantú, construida sobre una raíz, mbí, que tiene numerosas acepciones despectivas. Los españoles comenzaron a usarla en Santo Domingo, contra los dominicanos que no se sometieron a su gobierno cuando tuvo lugar la reanexión de aquel territorio de Quisquella a la Corona de España, allá bien mediado el siglo XIX, como desesperada fórmula transitoria con que algunos pensaron que se evitarían muy graves sucesos cuya renovación era temida con motivo de las turbulencias nacionales e interquisqueyanas, de carácter político y racial. Mambí quería decir insurrecto, bandido, criminal, revoltoso, infame, malo lo mismo allá por el Congo y tierras africanas ultracongoleñas que por las levantiscas sabanas y serranías de la antigua isla Española”.
Y continúa agregando Don Fernando Ortiz:
“Los militares españoles que evacuaron a Santo Domingo, al reanudar este pueblo antillano su historia de soberanía, vinieron a Cuba, y al bregar contra el insurgente cubano lo llamaron también mambí.
Fue en Cuba donde esta denominación despectiva pasó a ser un apelativo honroso.”
Esta explicación la hace don Fernando Ortíz en la reedición del libro “La Tierra del Mambí” del periodista irlandes-norteamericano, James O Kelly en el año de 1930. Este periodista y corresponsal del periódico The New York Herald que en aquella época era el de más fama y circulación en el mundo, estuvo con los mambises alrededor de seis semanas.
El 21 de febrero de 1873 O Kelly logra entrevistarse con el Presidente Carlos Manuel de Céspedes y varios jefes del Ejército Libertador.
Céspedes quedó muy bien impresionado por el periodista que mucho influyó con sus reportajes en bien de la causa cubana. Céspedes envió una carta al Director del Periódico agradeciéndole la cobertura noticiosa que tantos beneficios reportó a la causa independentista.
En 1874 O Kelly escribe el libro, “La Tierra del Mambí”, que despertó gran interés y del cual se hicieron, en poco tiempo, varias ediciones.
“Mambí” es un vocablo de formas substantivas y adjetivas aplicado al cubano separatista contra España, especialmente al que luchaba en armas por la cesación del coloniaje y el advenimiento de la independencia nacional. Mambí es una palabra africanoide, concretamente bantú, construida sobre una raíz, mbí, que tiene numerosas acepciones despectivas. Los españoles comenzaron a usarla en Santo Domingo, contra los dominicanos que no se sometieron a su gobierno cuando tuvo lugar la reanexión de aquel territorio de Quisquella a la Corona de España, allá bien mediado el siglo XIX, como desesperada fórmula transitoria con que algunos pensaron que se evitarían muy graves sucesos cuya renovación era temida con motivo de las turbulencias nacionales e interquisqueyanas, de carácter político y racial. Mambí quería decir insurrecto, bandido, criminal, revoltoso, infame, malo lo mismo allá por el Congo y tierras africanas ultracongoleñas que por las levantiscas sabanas y serranías de la antigua isla Española”.
Y continúa agregando Don Fernando Ortiz:
“Los militares españoles que evacuaron a Santo Domingo, al reanudar este pueblo antillano su historia de soberanía, vinieron a Cuba, y al bregar contra el insurgente cubano lo llamaron también mambí.
Fue en Cuba donde esta denominación despectiva pasó a ser un apelativo honroso.”
Esta explicación la hace don Fernando Ortíz en la reedición del libro “La Tierra del Mambí” del periodista irlandes-norteamericano, James O Kelly en el año de 1930. Este periodista y corresponsal del periódico The New York Herald que en aquella época era el de más fama y circulación en el mundo, estuvo con los mambises alrededor de seis semanas.
El 21 de febrero de 1873 O Kelly logra entrevistarse con el Presidente Carlos Manuel de Céspedes y varios jefes del Ejército Libertador.
Céspedes quedó muy bien impresionado por el periodista que mucho influyó con sus reportajes en bien de la causa cubana. Céspedes envió una carta al Director del Periódico agradeciéndole la cobertura noticiosa que tantos beneficios reportó a la causa independentista.
En 1874 O Kelly escribe el libro, “La Tierra del Mambí”, que despertó gran interés y del cual se hicieron, en poco tiempo, varias ediciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario