Noticia enviada a la redacción de la comisión Mambi, Patria y Libertad, por un Maestro Masón.
Mis apreciados cómplices habituales y visitantes:
El pasado 15 de mayo a mi esposo se le murió la laptop. Hizo un parpadeo cuando me encontraba trabajando en ella y el monitor se apagó para siempre. Era la compu de la familia, una herramienta y bien material que como la vivienda y múltiples artículos personales en Cuba, hay que compartirlos con los hijos, sus novias y amigos. Tenía seis años y la habíamos reparado en varias ocasiones, pero esta vez decidió descansar del exceso de trabajo y del calor a que la sometimos durante años.
Justo cuando nos encontramos en la promoción del Proyecto «Cuba 360» que publicamos aquí, sucede la sorpresiva pérdida de este instrumento medular para el despliegue metodológico y sostenible del programa y del ritmo de publicación de criterios en el blog. La falta de apoyo en recursos —soy una de las blogueras que no tiene PC— me lleva a pensar que quizás ha sido una maniobra sostenida de la policía política cubana para obstaculizar nuestro desempeño —mi esposo es dirigente opositor y también tiene una bitácora—, frenar nuestro desarrollo o mejor aún, asesinarnos mediáticamente. Por supuesto que bajará mi promedio de escritos, pero no cejaré en mi derecho de continuar emitiendo mis opiniones, pues considero que es un deber de cada ciudadano con su tiempo, la historia y su patria, graficar la realidad que lo circunda con palabras y denuncias, más aún cuando se trata, como en el caso cubano, de un régimen dictatorial.
Este inconveniente nos ha paralizado de momento, pero las circunstancias a veces nos imponen retos que si bien cierran una puerta, abren ventanas y nos inducen a ser creativos. Buscaré alternativas posibles porque me niego a aceptar pasivamente esta situación que le confiere una victoria más a la dictadura cubana, y aunque pequeña, una derrota a los que impulsamos y defendemos la democracia.
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